Campeonato Gafas!. Torneo 6

Hightlights. Un whatsapp fidelero informa 'por si vais conduciendo' (sic) de que un accidente (hostia tremenda) entre dos coches acaba de taponar el acceso a la casa de Fran. Accidente que se encuentra David y que ha evitado un Rubén que por entonces ya está en la casa de los Martínez. Sin embargo el accidente que realmente quiere evitar el ña es el de acabar el campeonato como top manta, para lo cual tendrá que recortar los nueve puntos que le saca un Fran que, para amenizar la espera hasta la llegada del araña, recurre a '1000 maneras de morir'. En primer lugar con el caso de la fallecida por un pepino y, justo cuando llega David, al aplastado en un concurso de bellezas rollizas, lo que cual da pie a la comparación entres estas y sus compañeras de padel, que al parecer también están abonadas a la tarifa ballena de Orange. El señor Baños, segundo, ha llegado muy motivado para ayudar a Fran a no ser último, y es que pese a tener al top one 16 puntos por debajo, sabe que en cuanto Fran no se juegue nada será una rémora aún mayor. A todo esto Fidel ya es campeón (casi tres años después) y nada se juega, por lo que en el primer partido se plantea, en voz alta y sin miedo a DavidPro, si lo que realmente quiere es ganar. Da igual, Sudafrica es tan floja que con poco esfuerzo los gabachos se colocan 2-0, mientras que los que sí se están esforzando son unos frandavinianos que, con su gol en la segunda parte, reciben recompensa y ponen nervioso a Rubén. El 3-1 final es exagerado, aunque nada comparado con lo que puede ser el siguiente partido de cumplirse la profecía de Fidel ('los franceses suelen golear a los arabes'). Sandro Rey no lo habría hecho mejor, y es que los saudíes salen como motos adelantándose y disponiendo de un penalti a favor en el minuto 44. Pero Fran lo lanza donde siempre (al centro, pese que él jure que no), y en la segunda parte empata Francia. Aún así el anfitrión adelanta de nuevo a los suyos hasta que, en el 78, un inocente penalti y expulsión del unionense supone el empate, y la sorprendente decisión de no reemplazar al central expulsado les acaba costando una derrota digna de la pareja top manta que son. Con Francia ya clasificada al top one solo le falta una victoria para pasar la manta a un hundido Fran. Viendo al rey del optimismo bajo de moral, no lo queda otra a David que ser él el que motive a su compañero durante el partido con Dinamarca, y aunque demuestra que no es precisamente un Luis Aragonés arengando, sus frases ('venga, ahí, haciendo cosicas') bajo la la banda sonora/terrorismo musical de Alejandro Sanz son suficientes para auparles y debilitar a un ña que, entre la "música", las historias de mamporreros de David, y el calor que le está entrando, acaba derrotado e incapaz de marcar un solo gol. Por suerte el top manta no se decidirá hasta después de cenar. Si Francia se clasifica aunque sea en los penaltis, el dudoso galardón se quedará en la sede palmareña, en caso contrario viajará a Espinardo en el coche de un Rubén al que ya hasta le duele el corazón. Los guaraníes empiezan siendo un muro difícil de batir, más aún cuando David marca en la primera mitad. Pero queda mucho y la segunda acaba siendo un asedio que increiblemente no da frutos a unos franceses a los que se les acaba el tiempo. Pero un top manta nunca decepciona y, en el 80, Fran sacando con el portero decide no dirigir el saque y dejar que el guardameta regale el balón al delantero rival para que, mansamente, mande el balón a la portería y el partido a la prorroga. Rubén respira y ahora es David el cardiaco y nervioso porque Francia domina y tiene cerca la clasificación y con ello la posibilidad de seguir sumando puntos. Sobre todo cuando el 120' el portero saca de forma antológica un disparo del ña a bocajarro que ya se cantaba como gol desde el pase de la muerte de Fidel. Ahora es Fran el que se ha salvado y se alegra de jugarse el top manta en unos penalti(le)s que no empiezan muy bien para él. Pierden 3-1 y solo se salvarán marcando los dos lanzamientos que les quedan y esperando que falle el rival. Es eso justo lo que ocurre y por tanto habrá que seguir lanzando. Más trabajo para el cardiólogo porque ahora es el anfitrión el cardiaco. Y es que vamos ya por el decimocuarto lanzamiento y el devorador de periodicos está obligado a anotarlo o todo habrá acabado para él. David no mira, Fidel se concentra, adivina la dirección del disparo, el portero lo para, Rubén se dispone a celebrarlo, Fran agacha la cabeza...hasta que, con el rabillo del ojo, ve como al guardameta se le escapa una pelota que acaba botando dentro de la portería. Eso ya es demasiado para un Rubén que acaba fallando el siguiente, y al que David acaba sentenciando. Y encima Fidel pisando (en su maltrecho tobillo) para cerrar la nefasta (e histórica) noche de un ña que no recordaba el sabor de un top manta desde ¡2008!.